Cada mañana, casi cien escolares utiliza el servicio para llegar a sus liceos en Rancagua y Machalí.

Gloria Correa, vecina de la población Los Cipreses, en Coya, le pone la mejor nota al servicio de transportes con el que El Teniente apoya todos los días a los estudiantes de la localidad. "Un 7. Gracias a los buses y los horarios flexibles, nuestros hijos e hijas pueden continuar sus estudios", dice con satisfacción.

Cada día, alrededor de cien niñas y niños son los beneficiados. Desde las 6.25 horas comienzan a salir cuatro buses con rumbo a colegios de Rancagua y Machalí. Regresan desde las 14.30 horas y el último a las 7.30 de la tarde. "El servicio que nos brinda El Teniente es de primer nivel. Las 60 familias beneficiadaspor esta iniciativa no tenemos los recursos para contratar buses escolares. Es un tremendo aporte para nosotros", agrega Gloria Correa.

"Sabemos de la importancia de este servicio para la comunidad y como División queremos potenciar la relación con nuestro entorno y por eso es importante brindar un apoyo que sea efectivo para los jóvenes coyinos", cuenta Carlos Cárcamo, jefe de la Unidad Transporte de Personal de la Gerencia de Servicios.

El diálogo con los vecinos permitió organizar los recursos de una mejor manera. "La empresa nos solucionó un problema. Antes los niños perdían una hora de clases, o simplemente no asistían a sus colegios. Ahora el primer bus sale a las 6:20 de la mañana y llegan un poco antes del comienzo de sus clases".

Cristián Sanhueza, director de Desarrollo Comunitario de El Teniente, asegura que "como empresa somos aliados de las comunidades y buscamos conocer su realidad y ser sensibles a las preocupaciones locales y ésta era una de ellas. El Teniente aporta de esta forma al objetivo de que los vecinos de Coya tengan una mejor calidad de vida".