Fue un trabajo de años y una inquietud permanente para ingenieros de nuestra División. La pregunta sonaba sencilla, pero aún no tenía una respuesta concreta que diera solución a la problemática. Hasta ahora.

Cómo recuperar cobre y molibdeno desde el relave es una interrogante que ya tiene una respuesta. Lo anterior, gracias a la firma de un contrato por 20 años que acaba de suscribir nuestra División con la Minera Valle Aconcagua, compuesta por empresas especialistas en el tratamiento de relaves y recuperación de metales.

“Lo más importante de esto es que respondemos a la misión de Codelco respecto a agregarle valor al negocio y, efectivamente, con este contrato estamos haciendo eso porque vamos a recuperar cobre del relave fresco, cosa que en 40 años no se hacía en esta División”, señaló nuestro gerente general, Armando Olavarría, durante la firma del contrato que se materializó el 4 de abril en el EILA.

Armando Olavarría y los ejecutivos que participaron de la firma del contrato no pudieron esconder su alegría por el prometedor futuro de este proyecto. 

La planta estará emplazada en una ladera cercana al último rápido del sistema de transporte de relaves, denominado rápido El Álamo, ubicado a unos 3 kilómetros del canal de contorno del tranque, lo que asegura que el avance en la construcción del tranque no intervenga las operaciones de esta planta por al menos los 20 años considerados en el contrato.

Este contrato implica una inversión de unos 30 a 33 millones de dólares hecha por la empresa que se adjudicó el contrato, quienes comienzan a rentabilizar una vez que vayan produciendo concentrado de cobre y molibdeno a través de tarifas establecidas previamente.

El gerente general de la Minera Valle Aconcagua, Juan Manuel Torres, dice que este proyecto es de gran importancia y transmite tranquilidad debido a la experiencia que tienen en tratamiento de relaves.

“Para nosotros es un trabajo tremendamente relevante y que conocemos. Ya tuvimos una experiencia con una planta parecida en El Teniente. Creemos que será un aporte tremendo para Andina, que es una división que está cambiando y nos interesa poder participar y aportar a esos cambios”, asegura Torres.

Funcionamiento

Primero cabe destacar que el tratamiento no se hará sobre relaves antiguos ni los gruesos de los relaves frescos, los cuales son ocupados para hacer el levantamiento de los muros de contención del tranque Ovejería (no se descarta que pueda ser parte de las optimizaciones futuras al contrato). Se trabajará directamente con el material fino que trae el relave fresco en la canaleta.

Finalizada la reunión, los asistentes se tomaron la respectiva foto oficial para inmortalizar el momento.

El proceso es el siguiente: se desvían los relaves actuales hacia las instalaciones que serán construidas, se flotan a través de cascadas con tecnología similar a la ocupada en Valle Central y otras operaciones de esas características. Posteriormente, lo que no flota, se devuelve a la canaleta y sigue su camino hacia Ovejería. 

Aquel preconcentrado que se recupera pasa a esta planta de flotación colectiva y selectiva, parecida a lo que actualmente se hace en cordillera, con la salvedad que será operada con celdas neumáticas que son de una tecnología más avanzada y que permite tener una planta de menor tamaño. El producto final será concentrado de cobre, de un mínimo de 26% de ley y concentrado de molibdeno de 45% le ley.

Para el ingeniero especialista de la GRMD, Pablo Albistur, este contrato viene a cumplir un antiguo anhelo que tiene que ver con la recuperación de metal desde donde no se estaba aprovechando.

“Este contrato es muy importante para la División, ya que se viene trabajando desde hace bastantes años bajo la búsqueda de rentabilizar nuestros relaves. En el contenido de nuestro relave existe una parte importante de cobre que no es posible extraerlo en nuestras operaciones en cordillera”, dice Albistur, lo que explica en gran medida la instalación de esta nueva planta.

Se estima que la dotación de esta nueva planta será de unos 120 trabajadores en periodo de construcción, los que disminuirán a 90 (operadores) distribuidos en tres turnos, una vez que la planta entre en funcionamiento. La primera piedra la podremos ver en unos 30 días más y la planta completa debiese estar en funcionamiento en abril de 2013.