“Vine desde Illapel, con mi papá, para presentar los papeles para hacer mi práctica”, recuerda. “Y cuando llegamos a las oficinas, me di cuenta de que se me quedaron los papeles en el bus, que ya se había devuelto a Santiago”.

Con la ayuda de su padre, lograron solucionar el inconveniente y comenzó su práctica profesional en la Superintendencia de Ingeniería de Procesos, en el área metalúrgica, en el año 2003. “Había enviado mi currículum por fax”, comenta riendo. 

Hoy, ¿de qué se trata tu trabajo?

Soy analista especialista de Procesos en la Planta de Tratamiento de Escoria, de la Fundición Caletones. Mi trabajo consiste en la gestión de seguridad y medioambiente, también veo las compras de insumos críticos de las unidades, elementos de protección personal, además de la elaboración de procedimientos de trabajo, instructivos y estándares operacionales.

Todas las mañanas tenemos un diálogo de desempeño, donde preguntamos el estado de las personas, cómo estamos y después vemos indicadores de seguridad. Luego pasamos al tema operativo, resultados, compromisos de operaciones y mantenimiento, informes, auditorías, compras de insumos, gestión con empresas colaboradoras, revisión de instructivos, inducciones. 

¿Qué cambios en la operación has visto en estos más de 20 años?

La misma Planta de Tratamiento de Escoria se creó para dar cumplimiento al Decreto 28 (que norma la emisión para fundiciones de cobre y fuentes emisoras de arsénico) y como ese, ha habido muchos cambios para que la operación sea más sustentable. Hay una manera más estricta en hacer las cosas para cumplir con el cuidado del medioambiente.

Hoy tenemos mucha modernización y optimización en los equipos, en el tratamiento de las escorias, del relave, hay políticas y compromisos de parte de Codelco que tienen que ver con las comunidades, con nuestros vecinos, con el cuidado ambiental. 

En seguridad también he visto mucho crecimiento. Así como crecen las personas, como industria y como empresa también vamos aprendiendo y sacamos lo mejor de nosotros. Hoy, por ejemplo, existe el programa de Baja Experiencia Laboral, donde las personas que recién entran que tienen que cumplir con un periodo de adaptación con un tutor, que debe tener competencias para que la persona se integre con conocimiento de los estándares y riesgos críticos.

¿Cómo imaginas la minería del futuro?

Con más automatización, con más datos que nos ayuden a hacer las cosas más rápido, optimizar la operación. La Fundición va a cumplir 103 años y cuando vemos imágenes de cómo está ahora y cómo era anteriormente, claramente vamos evolucionando en tecnología, en robótica, para sacar a las personas de la línea de fuego. 

¿Qué mensaje de seguridad le darías a tus colegas?

Que el autocuidado parte de uno. Recordemos que tenemos familia, que alguien nos está esperando para saber cómo estamos y, para eso, es importante que todas las herramientas que tenemos como Corporación, las ocupemos. Hagamos el Análisis de Riesgos del Trabajo (ART) como corresponde, no nos saltemos ningún paso, no improvisemos, usemos la Tarjeta Verde para detener un trabajo si no están las condiciones. Nosotros somos responsables de nuestra seguridad.