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Poder elegir la carrera de sus sueños, sin dudar si quedará o no, es lo que todo joven desea al momento de postular a una universidad. Sin embargo no todos lo logran, es necesario mucho esfuerzo y dedicación para poder cumplir con este objetivo. Rodrigo Cuellar, hijo de Francisco Cuellar, Superintendente de Mantenimiento LXSXEW de la Gerencia Planta de Radomiro Tomic, cumple con esas características, logrando 850 puntos en la Prueba de Selección Universitaria (PSU) de matemáticas, convirtiéndose así en uno de los dos puntajes nacionales que hubo en Calama. Hecho que le permitirá estudiar la carrera que él desea, Ingeniería Civil en la Universidad de Chile. Contento y emocionado relata que es un tremendo orgullo haber obtenido estos resultados.

"Para mí ha sido muy interesante y emocionante haber obtenido ese puntaje, he tenido muchos sentimientos distintos, pero todos muy gratos, me ha gustado harto vivir esta experiencia, además mucha gente me ha llamado, me han felicitado, me han apoyado y me he sentido muy bien, es una gran satisfacción que no olvidaré nunca", expresó.

Rodrigo egresó del colegio Chuquicamata, es el tercero de 4 hermanos, siempre fue un alumno ejemplar, de hecho obtuvo un 6.95 de promedio final en cuarto medio. Fue en tercero medio cuando comenzó su preparación para la PSU y sólo pudo lograrlo gracias a su esfuerzo y al apoyo de sus padres, que siempre han estado con él.

Familia orgullosa
Con orgullo recibieron la noticia en su familia y ven, con una gran ilusión, un buen porvenir para Rodrigo. "Estamos todos felices por él, por el éxito alcanzado y el logro obviamente es de él que se esforzó todo este tiempo para lograr lo que tanto deseaba, que era tener un tremendo puntaje y estamos muy felices", manifestó Francisco Cuellar,padre de Rodrigo. Mientras que para su madre Silvia Tapia: "es una alegría muy grande, estoy muy contenta, mi hijo se preparó dos años, estudió bastante y esto es el fruto de su esfuerzo, nosotros lo apoyamos en lo que más pudimos, pero el merito es de él" recalcó con orgullo.

Un importante logro para Rodrigo y su familia que en parte ha sido posible gracias a la oportunidad que ha tenido Francisco, su padre, de trabajar en Radomiro Tomic, y acceder así a mejor educación para sus hijos. "Estar trabajando en una tremenda empresa como Radomiro Tomic, obviamente permite una estabilidad y tranquilidad para poder ver el futuro de nuestras familias y eso también ha permitido que se esfuercen, vean como una buena preparación y un buen trabajo puede permitir grandes cosas", indicó.

Rodrigo, ahora se prepara para comenzar a vivir una nueva etapa, llena de desafíos y oportunidades y haber sido un excelente alumno en la enseñanza media, sin duda, le ayudará a sortear mejor el reto que significa ser un estudiante universitario.