Codelco aprovecha casi 8 veces cada gota de agua fresca
Codelco aprovecha casi 8 veces cada gota de agua fresca
Divisiones del norte emplean la mitad del agua que usaban hace 25 años para producir una tonelada de cobre. Todavía existe espacio para seguir mejorando.
Menos del 5% del agua fresca del país es utilizada por la minería. Sin embargo, el hecho de que parte de las faenas de la industria se ubiquen en zonas geográficas donde hay escasez de este elemento sitúa a la minería como uno de sus principales usuarios.
Codelco -y en particular las operaciones de la Corporación en Calama- ha disminuido en poco más del 50% el consumo de agua fresca por cada tonelada de mineral tratado en los últimos 25 años. El índice de recirculación de agua supera el 80%, en divisiones emblemáticas como Chuquicamata, por ejemplo. Para el gerente de Energía y Recursos Hídricos, Andrés Alonso, "asegurar el abastecimiento sustentable y competitivo de las operaciones es clave para el desarrollo de la Corporación. En esta línea es importante destacar los logros obtenidos y es fundamental continuar con el desafío del uso eficiente de los recursos hídricos, donde creemos que aún quedan espacios para avanzar".
El año 2000, por ejemplo, un 68% del agua utilizada en Codelco era aprovechada nuevamente. El año pasado, esta cifra alcanzaba al 76%, sobre una base de 681 millones de metros cúbicos utilizados. "Continuar con resultados exitosos, aumentando el reciclaje de agua, es uno de los focos claves en el uso eficiente de los recursos hídricos. Asimismo, es de suma importancia esforzarnos en disminuir los consumos de agua en los procesos, revisando y modificando las prácticas en el uso de agua, foco que abre un importante espacio de innovación y desarrollo", explicó Alonso.
El tema no es menor para Codelco. Y los esfuerzos en este sentido son evidentes. Uno de los proyectos estructurales de la Corporación –RT Sulfuros- considera en sus operaciones futuras el uso de agua desalada. Un desafío importante, que implica la construcción de una planta desalinizadora y una línea de impulsión con una extensión de 160 kilómetros.
Andrés Alonso explica que "debemos tomar conciencia de que el costo del agua de mar es al menos 10 veces superior al de nuestras actuales fuentes, lo cual nos desafía a disminuir los consumos no sólo para asegurar la disponibilidad del recurso, sino también para cumplir con nuestra meta de mantenernos en el segundo cuartil de costos de la industria", sentenció el gerente de Energía y Recursos Hídricos.
