Lo atractivo de esta crema de noche es que tiene “cobre activo” entre sus componentes principales. Por ello, los creadores de la crema se acercaron a la ICA (International Copper Asociation) para solicitar antecedentes que respaldaran el mensaje medial, resaltando la cualidad del cobre como un elemento esencial para la vida y su aporte a la calidad de vida.

En tanto, en Alemania se lanzó hace dos años al mercado sanitario un curioso dispositivo de cobre. A simple vista el Hastchi-free parece un juguete, pero en realidad se trata de un sencillo y eficaz sistema antiresfrío. Es un alambre de cobre doblado y terminado en dos espirales cónicos que se introducen en los orificios de la nariz.La operación es indolora y puede repetirse unas 3 a 4 veces al día, por diez minutos cada vez. Es más efectivo en los estados iniciales del resfrío.

El resultado es una mayor ventilación, ya que al tener forma de cono, los espirales permiten la entrada de más aire; y, a su vez, el efecto bactericida del cobre impide la prolongación del resfriado, una de las enfermedades más comunes del hombre. Por el momento, el aparato -que cuesta cerca de diez dólares y puede durar indefinidamente- sólo es comercializado en Alemania.