El Teniente hace la diferencia en la mantención de sus trenes
El Teniente hace la diferencia en la mantención de sus trenes
Tras un proceso de mantención mayor, una de las 10 locomotoras de producción que presta servicios en el Ferrocarril Teniente 8 en División El Teniente, regresó a la producción en tiempo récord y ya inició el proceso de marcha blanca.
Desde que partió a Maestranza Casagrande, en Santiago, y regresó a El Teniente, fue un periplo que le cambió la cara y el corazón a locomotora 133. Un proceso de mantención mayor que, más allá de renovar los fierros, se encargó de la actualización del sistema de electrónica de potencia y tracción de la máquina.
El jefe de Unidad Mantención Ferrocarril Teniente 8 de la Superintendencia de Mantenimiento Mina de División El Teniente, Carlos Narbona, explica que "es la segunda locomotora de cinco que van a este primer proceso. Es un mantenimiento de media vida que se debe realizar cada 10 años para locomotoras de producción y que se suma al mantenimiento normal que realizamos en Maestranza 1".
El experto cuenta que "en este periodo la coordinación y comunicación con nuestro cliente, ha sido fundamental para mantener los 8 trenes en vía, dado que el plan de mantención es exigente y con una locomotora menos amerita un gran esfuerzo de todos. El proceso continúa y ya estamos planificando el envío de la siguiente".
Narbona detalla que el proceso de mantención mayor dura entre 90 y 100 días desde que la máquina sale hacia la capital y regresa a la División. A cada locomotora se le hizo primero un informe técnico y se definió el orden de prioridad para ir al mantenimiento mayor. Ahí hay una actualización de sus componentes, renovando la tecnología para que los repuestos sean compatibles con lo que hoy distribuye el mercado".
Así, la empresa especialista Ferrostaal debe realizar una recuperación completa de la súper estructura (carrocería), renovación de la electrónica de potencia, o convertidores de tracción, además de la actualización del sistema de rodado, como bastidores y motores, entre otras.
"La locomotora se aborda por completo y se hace una renovación de los componentes que respondan a lo que sea necesario", cuenta Narbona. Apenas llegó la locomotora a Colón, el equipo de trabajo se empeñó en regresarla pronto a sus funciones.
"Venía desarmada. La súper estructura y rodado llegaron por separado y en cinco días la locomotora se armó y quedó lista para su puesta en marcha en Teniente 8, periodo que durará aproximadamente 15 días en caso de no existir inconvenientes", agregó.
