Trabajadores de Andina llevan las artes marciales a la comunidad

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Trabajadores de Andina llevan las artes marciales a la comunidad

Carlos y Samuel Arancibia –operadores de la mina subterránea y pertenecientes al Sindicato Unificado de Trabajadores (SUT)– enseñan a niños y niñas las disciplinas de Karate Kyokushin WKB y Jiu Jitsu brasileño. Un proyecto social de voluntariado que compatibilizan con su labor minera.

Respeto, disciplina y rigurosidad son algunos de los valores que los hermanos y Carlos y Samuel Arancibia transmiten todas las semanas a los menores del colegio Edén del Niño de Los Andes. En ese establecimiento, estos dos trabajadores de Codelco Andina están desarrollando un proyecto social que busca acercar las artes marciales a la comunidad de forma educativa.

Se trata de un taller para más de 20 alumnos y alumnas de 5° a 7° básico. “Estos niños y niñas son el futuro de nuestro país, por ende, nuestro aporte es solo un granito de arena para que sean mejores personas”, explica Carlos, mantenedor mecánico calificado de la Mina Subterránea. Ambos hermanos reconocen sentirse orgullosos por estrechar vínculos a través de esta iniciativa, que expresa el compromiso de los trabajadores de Andina y la División con la comunidad.

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En mayo se inició el taller de artes marciales que impulsan trabajadores de Andina.

Los instructores deben compatibilizar sus turnos laborales. Sin embargo, el entusiasmo de los pequeños es un aliciente. “Cada semana los horarios son distintos, pero no ha sido impedimento para desarrollar las clases”, dice Carlos, quien además es apoderado del colegio. “Estamos muy contentos con la convocatoria y la motivación del grupo”, agrega Samuel, operador base en la Mina Subterránea.

Los niños

Isaías Cifuentes, de 11 años, quien por primera vez practica artes marciales, cuenta que el taller ha cumplido con sus expectativas de aprender a defenderse. “También practico fútbol y básquetbol, pero el karate es lo que más me gusta”, cuenta. Por su parte, Sady Astorga, de 10 años, comenta que “lo que me gusta de esta disciplina es que mezcla deporte y autodefensa”.

Transmitiendo valores

Carlos Arancibia practica hace diez años artes marciales. Se inició en el Jiu Jitsu brasileño, y posteriormente prosiguió con el Karate Kyokushin. Fue campeón sudamericano en MMA (artes marciales mixtas) y tercero a nivel nacional en  Jiu Jitsu. Mientras que Samuel es cinturón naranja en Kyokushin, Jiu jitsu y Kick Boxing. Carlos además realiza otro taller en el Liceo América, enseñando la disciplina a jóvenes de sectores vulnerables de la comuna junto a su instructor, Alberto Zamora.